Como muchas cosas, la Fundación Illumination inició como una simple idea.
Paul León, quien se inscribió en el 2007 en un programa de Maestría de Administración de Empresas Ejecutivo de la Universidad de California en Irvine (UCI), quería ayudar a aquellos que llaman hogar a las calles del condado de Orange. Así que empezó a trabajar en su garaje con la intención de convertir su idea en un proyecto escolar.
Diez años después, la idea de León se ha convertido en una de las organizaciones de asistencia a las personas sin hogar más grandes de su tipo, con un presupuesto operativo anual de $18 millones y sirviendo a miles de personas en todo el sur de California.
“Nuestra curva de crecimiento va hacia arriba”, explicó León en una mañana reciente en el vestíbulo del centro de servicios múltiples de la fundación en Stanton. El edificio de dos pisos frente a Katella Avenue desde el Ayuntamiento de Stanton sirve como sede de la fundación y como centro de recursos para la población sin hogar del área.
León, un enfermero capacitado con experiencia en cuidados críticos y salud pública, fundó la fundación sin fines de lucro para crear programas de cuidado médico, rehabilitación y recursos de vivienda estable para personas sin hogar que sufren de enfermedades mentales, abuso de sustancias y otros problemas de salud. Hoy en día, el proyecto de León se ha convertido en una organización con raíces en todo el condado de Orange y Los Ángeles, sirviendo a casi 30,000 personas.
“Nuestra misión es romper el ciclo de la falta de vivienda”, dijo.
Un defensor de larga data en los temas relacionados con la pobreza, la falta de vivienda y el cuidado de salud, León inició con la idea de una organización que pudiese proporcionar tratamientos y recursos a las poblaciones en riesgo cuando visitaba los refugios de emergencia en Fullerton y Santa Ana. Vio habitaciones abarrotadas donde adultos y niños hambrientos dormían en el suelo. Muchos padecían problemas médicos. En un caso, un recién nacido conectado a una máquina de apnea del sueño tenía problemas para respirar.
“Pensé: ‘Podemos sacar a esta gente de aquí’”, expresó.
Al principio, la misión de León era colocar a las personas sin hogar en viviendas temporales, principalmente en moteles. Pero los moteles locales a menudo no ofrecían entornos seguros para las familias y los niños.
Sabíamos que, para alcanzar el éxito, estas personas necesitaban de una vivienda más estable”, señaló León. “Los niños necesitan un lugar donde se sientan seguros”.
Así que la Fundación Illumination se asoció con agencias que podían ofrecer ayuda. La fundación atrae la atención de funcionarios públicos, defensores de los sin techo y líderes religiosos que ven el trabajo de la fundación como un paso importante y efectivo para combatir la falta de hogar. Entre los grupos con los que la fundación está asociada se encuentran la Diócesis Católica de Orange y Caridades Católicas del condado de Orange.
“La Fundación Illumination es un recurso importante en el cuidado no solo de la inseguridad alimentaria y de vivienda, sino también de los conductores comunes de estos desafíos –a menudo el abuso de sustancias y la salud mental”, dijo el obispo de la Diócesis de Orange, Kevin Vann. “Es una bendición para la comunidad su labor para el cuidado de los marginados y para ofrecer un camino para salir de una situación desesperada”.
Entre los proyectos recientes de la fundación está la conversión de una parte del vecindario Tina-Pacific de Stanton en un jardín comunitario, área de juego y centro infantil con clases de refuerzo después del horario escolar para los estudiantes locales y sus padres.
“Queríamos asegurarnos de que los niños sigan asistiendo a la escuela, aprendan inglés y se alimenten de manera saludable”, explicó León.
El proyecto ha ayudado a transformar el vecindario históricamente de bajos ingresos, dijo el administrador de la ciudad de Stanton, Jim Box.
“Hemos visto mejoras significativas en el área”, dijo Box, quien conoció a León en una conferencia de redacción de subvenciones. “El crimen ha disminuido y la participación cívica ha aumentado, todo con la ayuda de la Fundación Illumination”.
En el centro de servicios múltiples en Stanton, las personas pueden concertar citas para servicios de asesoramiento y servicios de colocación de vivienda. Pueden comer algo mientras navegan por la red desde un laboratorio con computadoras. En una mañana reciente, madres jóvenes estaban sentadas en el vestíbulo con sus bebés esperando citas.
“Algunas de las personas a las que servimos toman hasta seis autobuses para llegar aquí”, indicó León.
El edificio se alquila a la ciudad de Stanton por $1 al año. Hubo resistencia inicial por parte de los residentes que se oponían a la prestación de servicios para personas sin hogar en su vecindario. Pero hoy en día esas preocupaciones han sido compensadas en gran medida por los beneficios tangibles –principalmente, trabajar para sacar a la gente de la calle, indicaron las autoridades de la ciudad.
El alcalde de Stanton, David Shawver, elogió la colaboración de la ciudad con la Fundación Illumination y otros grupos como una manera eficaz de combatir un problema que ha sido latente por mucho tiempo.
“Stanton ha sido un modelo para el condado”, señaló Shawver, miembro de la Parroquia de San Policarpo. “Tenemos leyes estrictas y una vigilancia para hacer cumplir las leyes proactiva, pero ofrecemos los mejores programas de reubicación, educación y tratamiento médico. Encontramos que hay que hacer cumplir la ley, pero también debemos ofrecer servicios”.
Estos servicios se diseñan en colaboración con grupos sin fines de lucro y son financiados con subvenciones, agregó Shawver.
“La recompensa que recibimos es sustancial para nuestros contribuyentes”, señaló.
Junto con los servicios de consejería de salud mental y abuso de sustancias, la colocación en viviendas y los servicios infantiles, una gran parte del trabajo de la fundación es proporcionar atención médica y de recuperación a las personas sin hogar a través de alianzas con hospitales locales. Y alrededor del 30 por ciento del personal de la fundación vivía anteriormente en las calles.
De acuerdo con el censo más reciente del 2-1-1 del condado de Orange, se contó a 4,792 personas sin hogar en el condado de Orange en junio de 2017; el 2-1-1 es una organización sin fines de lucro de servicios humanos y de salud.
León dijo que enfrentó dificultades cuando inició la fundación para persuadir a los funcionarios públicos de todo el condado para que se ocuparan de la falta de vivienda. Hoy en día, él ya no enfrenta ese problema.
“Fue difícil convencer a las ciudades de que era un problema”, dijo. “Hoy en día, todo el mundo sabe que la falta de vivienda es un problema que está en aumento”.