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‘ESTUVE PRESO Y ME FUISTE A VISITAR’

PEREGRINOS CATÓLICOS VISITAN A PRESOS DE UNA CÁRCEL MODELO EN EL HONGO, TECATE, BAJA CALIFORNIA

By JORGE LUIS MACIAS     10/22/2015

Como cada año, decenas de católicos de los condados de Orange y Los Ángeles pusieron en acción su fe e hicieron viva la cita bíblica del evangelista Mateo 25,36: “Estuve preso y me fuiste a visitar”.

La madrugada del 23 de septiembre, un autobús partió desde la ciudad de San Gabriel, Calif., hacia Tecate, Baja California. Su misión: visitar una cárcel, en el Día de Nuestra Señora de la Merced, patrona de los encarcelados

Desde 2002, miembros de la Caridad Misionera Teothokos (Madre de Dios en Griego) han llevado un poco de consuelo y un abrazo a los reclusos del Centro de Reinserción Social (CERESO) El Hongo.

“A muchos de estos presos nadie los visita nunca”, dijo Miguel Barba, integrante del grupo Jóvenes para Cristo de la Iglesia Nuestra Señora de LaVang, en Santa Ana. “Ellos esperan que les dirijamos al menos una mirada de compasión, unas palabras de aliento o un abrazo”.

No van con las manos vacías. En el autobús reúnen para los internos, comida, ropa interior nueva para hombres, calcetines, camisetas, jabón de baño, champú y diversos artículos para el aseo personal.

Con 78 años a cuestas, Socorro Batanero, coordinadora del grupo, dijo que la misión inició hace 18 años cuando visitaban el CERESO de Mexicali.

“En cada rostro de los presos veo a mis propios hijos, y a todos ellos quisiera darles un abrazo de madre”, dijo Batanero, feligrés de la Iglesia St. Anthony, en la ciudad de San Gabriel. “A veces quisiera poder hacer más, pero no puedo…ya estoy cansada”.

Desde 2002-2007, bajo el Plan Estatal de Desarrollo, el gobierno del Estado de Baja California pronunció los objetivos y líneas estratégicas a realizar para abatir en forma específica el rezago en materia de readaptación social.

En la actualidad, El Hongo es una prisión con un modelo estratégico de reinserción social que abarca los aspectos educativos, de capacitación laboral, salud, fortalecimiento del núcleo familiar y ayuda en la eliminación de adicciones, tanto para sentenciados como procesados.

Con la apertura del CERESO El Hongo, las autoridades resolvieron el problema de sobrepoblación de los centros penitenciarios de Ensenada, Mexicali y Tijuana, dando paso a la implementación de medidas que garantizan un verdadero programa integral de readaptación.

Ubicado en el municipio de Tecate, el centro penitenciario de alta, mediana y mínima seguridad ofrece espacios deportivos, de estudio, de cultura, naves industriales, un hospital y modernos sistemas de seguridad.

Cuenta con personal administrativo y técnico altamente capacitado, quienes muestran un respeto y apoyo total por las actividades religiosas y de fe, que influyen en la vida de los 7,000 internos.

Sale de la cárcel y ahora es catequista

“Estar cerca de Dios me dio fuerzas para soportar el tiempo que pasé encarcelado”, dijo Juan Antonio Hernández Gómez, un ex reo que purgó una sentencia de 11 años por un delito de presunto abuso sexual contra una menor de edad, en Mexicali. “Hoy, aprecio mi libertad como un tesoro muy valioso”.

Hernández Gómez, de 39 años, fue liberado el 11 de agosto de la cárcel de El Hongo. Durante su reclusión – desde 2004 a 2015 – participó en la catequesis de los reos, al lado de la monja María Teresa Ruiz, Hermana del Sagrado Corazón de Jesús y de los Pobres.

“La libertad que ahora tengo me da la oportunidad de servir a mis hermanos, a ser agradecido con Dios por el don de la vida y a ayudar a otros para que se realicen material, física y espiritualmente”, indicó Juan Antonio, desde su natal Ciudad Tecolutilla, Tabasco, donde ahora es catequista en la parroquia de San Antonio de Padua.

El guía espiritual de los agentes de la pastoral penitenciaria de Tecate, el Padre Nicolás Batta Tierrablanca, sacerdote de la Orden de la Merced dijo que la visita anual que realizan los peregrinos de Estados Unidos hace sentir a los reclusos que sus vidas le interesan a alguien más.

“Cuando se acerca la fecha de celebrar a la Santísima Virgen de la Merced, ellos saben que sus visitantes, de algún modo les traerán consigo algunas prendas de vestir y artículos que les servirán de mucho”, dijo el Padre Batta. “Nosotros sabemos quiénes de ellos tienen mayores necesidades, así que son los primeros en recibirlos”.

Batta tierrablanca visita el hongo desde hace 8 años, junto con un equipo integrado por la profesora hilda maría larios, benita jiménez, maggie ruiz y flor núñez, entre muchas otras personas.