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¡SALGAMOS!

LAS IGLESIAS CATÓLICAS DEL CONDADO DE ORANGE CELEBRAN LOS SACRAMENTOS AL AIRE LIBRE EN MEDIO DE LA PANDEMIA

9/10/2020

Uno de los aspectos positivos dentro de la nube oscura del coronavirus es la aparición de misas al aire libre, bodas, bautismos, confirmaciones y funerales en todas las parroquias católicas del Condado de Orange.

A raíz de los cierres por coronavirus,  nuestras escuelas hicieron una notable transición a la educación a distan-cia. En pocos días, todas las escuelas católicas de nuestro estado estaban en funcionamiento, enseñando a los estudiantes en línea.

En un momento en que el aislamien-to es una parte sombría de la vida familiar católica, las parroquias de la Diócesis de Orange están celebrando nuestros amados sacramentos y cele-braciones litúrgicas al aire libre en una variedad de formas originales.

“La ciencia parece estar diciendo que el coronavirus no funciona tan bien al aire libre”, observa el reverendísimo  Timothy Freyer, obispo auxiliar, por lo que los líderes diocesanos bendijeron esta primavera la idea de las ceremo-nias religiosas en exteriores. “La gente está segura de que es una experiencia segura, limpia y positiva”.

Los feligreses aprecian estar al aire libre, dice el obispo Freyer. “Nos ofrece la oportunidad de disfrutar de la natu-raleza, y hay un sentido de comunidad al estar juntos bajo el cielo”.

En la Iglesia de Nuestra Señora Re-ina de los Ángeles en Newport Beach, el pastor Steve Sallot dice que los feligre-ses están entusiasmados con las misas al aire libre, las celebraciones eucarísticas en auto y la reciente ceremonia de la Unción de los Enfermos.

“Estamos bendecidos aquí en el sur de California con un clima generalmente bueno”, señala el padre Sallot, “y estamos espe-cialmente bendecidos a lo largo de la costa por tener generalmente una brisa y temperaturas más frescas”.

Debo confesar que cuando el sol brilla y estoy cubierto de vestimentas, de pie en el exterior, extraño el aire acondicionado de la iglesia”, añade. “

Pero la mayoría de nosotros nos senti-mos bendecidos por estar en el ambi-ente exterior, especialmente durante las liturgias de la madrugada o de la noche.

 ¡Es hermoso!”Cuando la pandemia apareció por primera vez y las iglesias se vieron obligadas a cerrar, muchas parroquias se conectaron inmediatamente por Internet y comenzaron a transmitir en vivo las misas, ofreciendo meditaciones y oraciones diarias en los medios socia-les, y establecieron estudios bíblicos vir-tuales y otras “reuniones” en las iglesias, explica el obispo Freyer. 

Hemos aprendido a utilizar la tec-nología y las herramientas que espera-mos seguir utilizando en los próximos años”, dice. “Estudios bíblicos en vivo, encuentros en grupo, reuniones de oración —queremos seguir viéndolos, porque los enfermos y los confinados a casa mantienen sus conexiones cerca-nas con sus parroquias locales”.

Además de los feligreses de siempre, algunos de los que van a misa o visi-tan un sacramento en automóvil son católicos no practicantes o aquellos que están interesados en la fe católica, dice el obispo Freyer. “Hay nuevas relaciones con la Iglesia que provienen de nues-tros esfuerzos de transmisión en vivo”,  declara.

“En la medida de lo posible, nuestra Iglesia de la tradición está ley-endo los signos de los tiempos y se está volviendo innovadora, encontrando nuevas formas efectivas de hacer todos los ministerios.”

Señala que estos nue-vos esfuerzos son una extensión lógica del Plan Estratégico del obispo Kevin  Vann, la guía de crecimiento reciente-mente adoptada por la diócesis.

El padre Angelos Sebastian de la Iglesia de San Kilian en Mission Viejo está de acuerdo.

“Lo que estamos haci-endo ahora es llegar a más gente de la que nunca imaginamos”, dice el padre Sebastián. “La semana pasada conocí a alguien que dijo que no estaba listo para volver a la Iglesia, pero vio nues-tros mensajes en los medios sociales y asistió a nuestras misas en línea, y dijo:

 ‘Ahora me doy cuenta de que la Iglesia ya no es la misma’ y está dispuesta a volver”.

En San Kilian, algunas misas son transmitidas en vivo, todas son ofreci-das afuera con la gente permaneciendo en sus autos hasta la comunión, y un servicio de confesión semanal en auto atrae a cientos de autos.

“Me encuentro con gente que se ha alejado de la Iglesia y están encantados de regresar a la Iglesia porque la Iglesia les está dando la bienvenida”, explica el padre Sebastián.

“Me dicen que nunca más se alejarán”.Mientras que la pandemia ha sido un gran trastorno, la Iglesia se ha adaptado creativamente a los servicios en vivo y en directo.

“Este puede ser un momento clarificador para nosotros”, señala Katie Dawson, directora dioce-sana de evangelización y formación en la fe de las parroquias.“Los servicios de culto al aire libre han sido sorprendentemente me-jores de lo que imaginaba”, dice el Padre Daniel Seo, vicario parroquial de la Catedral de la Sagrada Familia en Orange.

“Los feligreses han sido muy respetuosos y han hecho todo lo posible para mantener una atmósfera de oración silenciosa antes de comen-zar. A veces, encuentro que hay mejor oración silenciosa y preparación antes de empezar la celebración fuera, que en nuestra iglesia.”

Los líderes de la iglesia dicen que esperan que las parroquias que avanzan ofrezcan programas híbridos que con-tinúen llegando a la gente en vivo y en línea.

“Nuestros feligreses comparten los vínculos con sus amigos y familias”,  señala el P. Sebastián, “y tenemos asis-tentes de 24 países diferentes viendo nuestras misas en vivo”.

Además de ofrecer funerales y bodas al aire libre, las parroquias locales están programando bautismos al aire libre,  ceremonias de RCIA y confirmaciones. “Creo que veremos nuestros ministerios teniendo lugar de diferentes maneras en el futuro”, dice el obispo Freyer.

Los esfuerzos de formación en la fe de nues-tras parroquias proporcionan flexibil-idad y permiten a los individuos tener una relación con Cristo y la Iglesia.

 “Estoy agradecido de que la gente haya sido tan positiva y por su apoyo a nuestras parroquias”, añade. “Ha sido inspirador”.