Llenos de gozo y alegría, centenares de latinoamericanos, y peruanos, en particular, rindieron culto a su santo patrón: el Señor de los Milagros, la imagen sagrada que se mantuvo intacta después de varios terremotos, a finales del siglo XVI.
Bajo un marco pletórico de fe, en la Catedral de Cristo, el Excmo. Tim Freyer Obispo Auxiliar de la Diócesis de Orange, se dirigió a la comunidad católica y recordó que la imagen es un milagro.
“Es interesante que los milagros atribuidos a esta imagen del Señor de los Milagros han ocurrido durante los temblores”, dijo el Obispo en su homilía, el 21 de octubre. “Cuando Jesús murió en la cruz también tembló toda la tierra”.
Aunque la devoción al Señor de los Milagros no es tan conocida fuera de Sudamérica, la presencia de numerosos inmigrantes peruanos ha permitido que cada año aumente el número de feligreses que acuden a implorar por su amor, perdón y misericordia.
“Mi fe en el Señor de los Milagros es parte de la historia de mi familia”, comentó Gustavo Pacheco, de 66 años y nacido en Lima Perú. “Me recuerdo sentado en los hombros de mi padre Rocco, cuando me llevaba a la procesión”.
De hecho, Pacheco dice que su vida se la debe a un milagro. Su madre Dulia había perdido tres bebés durante el embarazo, antes que él naciera, a los siete meses. Luego vinieron a la vida, sin mayores complicaciones, sus hermanos Miriam y Ernesto.
“Para mí, el Señor de los Milagros es mi amigo, mi padre, mi compañero fiel de toda la vida”, declaró Gustavo, quien es una de las docenas de cargadores de la imagen que pesa 2.1 toneladas. “Cada año que pasa siento con mayor fuerza su presencia en mi vida”.
La imagen original del Señor de los Milagros se encuentra en la pared del Santuario de Las Nazarenas en Lima y en la Catedral de Cristo, una réplica montada en una anda de 50 libras de peso fue cargada por niños y niñas: Ethan Paseta, Jan Torres, Raquel Erbar, Gabriela Erbar, Daniela Vallejos, Jacob Maldonado, Nathan Maldonado y Matthew Cayro.
El Señor de los Milagros ha sido proclamado Patrono de los Inmigrantes en el condado de los Ángeles por el Arzobispo de Los Ángeles, José H. Gómez, y está en proceso para ser proclamado también en el condado de Orange.
Gracias a las Hermandades de Señor de los Milagros en Los Ángeles, Canoga Park, North Hollywood, Van Nuys, Pico Rivera y el Condado de Orange, con su trabajo de fe y devoción han hecho posible, junto con los fieles que cada vez siguen aumentando, conocer al Señor de los Milagros, Patrón del Perú.
la historia del señor de los milagros
1651: Un esclavo africano pintó una imagen de Jesús en la cruz, con la Santísima Virgen María y María Magdalena, en una pared. Se cree que pudo haber sido Benito o Pedro Dalcon.
1655: Un terremoto masivo azotó la ciudad de Lima. Miles de personas murieron y secciones enteras de la ciudad fueron derribadas, pero el adobe que tenía la pintura no se vio afectado por completo.
1670: Un enfermo terminal con algún tipo de problema cerebral. Desesperado por ayuda, visitó la imagen con fe y, milagrosamente fue sanado. La noticia se extendió rápidamente, y la imagen se convirtió en un sitio de peregrinación. Enormes multitudes comenzaron a reunirse para ver la imagen, y las autoridades comenzaron a preocuparse. Preocupados porque la imagen estaba causando demasiado alboroto, la regla local ordenó que la imagen se cubriera.
Y fue entonces cuando las cosas se pusieron realmente raras.
Un pintor fue enviado para raspar la imagen de la pared. Empezó a subir por su escalera, pero de repente se sintió abrumado por escalofríos. Bajó y las personas cercanas ayudaron a calmarlo. Intentó volver a subir, pero tuvo el mismo problema. Él fue físicamente incapaz de destruir la imagen.
Se envió una segunda persona a la imagen, pero se negó a hacer el trabajo una vez que se acercó. Aparentemente vio algo sobre la imagen que cambió su mente, pero no quiso explicar.
Perdiendo la paciencia por lo que debería haber sido una tarea fácil, el gobernante envió a una tercera persona, esta vez, un soldado entrenado. Cuando el soldado se acercó a la imagen, la imagen cambió sobrenaturalmente ante sus ojos. Más tarde dijo que comenzó a brillar y se volvió más hermoso. Como resultado, no pudo destruirlo.
1687: Otro gran terremoto golpeó a Lima. Nuevamente, la imagen sagrada sobrevivió. La devoción a la imagen había aumentado enormemente, por lo que alguien decidió celebrar una procesión con la imagen.