Mario Carabez Jr., predicador y cantautor católico asegura que, si se buscan solamente respuestas humanas a los desafíos u obstáculos que se presentan en la vida o en el matrimonio, “solamente se estaría buscando una respuesta mundana” es importante incluir a Dios en el proceso.
“Para empezar, todo aquel que lleva guardados recuerdos malos o tristes de su pasado, tiene que encontrar sanación interior para poder superar todos sus obstáculos, y la única sanación verdadera y que te hace libre es la salvación en Jesús.
Autor de “Mi Razón de Vivir”, o “Pudiste Bajar de la Cruz” del álbum “Adoración por Siempre”, y “Te Necesito Junto a Mí”, de su nueva producción discográfica “Libre Soy”, Carabez Jr. rindió su testimonio de vida ante unas 3,000 personas en el Congreso “La Alegría del Amor en la Familia”, organizado por la Renovación Carismática Católica de la Diócesis de Orange.
“Primero hay que aceptar que un problema existe, que hay dolor y sufrimiento; todo comienza cuando se hace una autoevaluación y poniendo delante de Jesús todas las cosas que necesitan ser arregladas”, dijo.
“Hay que traer al corazón cómo inició el amor en la pareja, cómo se dio el matrimonio, etc., y todo te lleva a lo mismo: a buscar una relación con el Señor, que, no necesariamente te cambia, pero inicias una relación con Él, comienzas a ser más abierto y a aceptar todo con mayor paciencia”.
el dolor del abandono de su madre
El pasado 11 de octubre, en el Centro de Convenciones de Anaheim, Carabez Jr. narró que, justamente su dolor y sufrimiento más grande se dio cuando su madre decidió abandonar a su papá.
“Hubo un tiempo difícil”, dijo. “Un tiempo de odio; no tengo una relación cercana [con ella] o de verla todos los días, pero cuando puedo le mando mensajes”.
Pero antes de predicar la Palabra de Dios, dese hace cinco años, él tenía que sanar y perdonar a su madre y sacar de dentro de sí sus sentimientos de odio por el abandono de ella.
“Todos buscamos a Dios cuando hay problemas”, dice Carabez Jr. “Dios quiere sanarte primero a ti; uno comienza a reconocer sus pecados y, él entra en tu corazón, comienzas a sanar y a reconocer tu vida de pecado, de dolor y de tristeza.
El predicador nacido en Los Ángeles dijo “uno no debe darse por vencido, porque cuando conoces a Jesús, la fe comienza a actuar, es lo que te da las fuerzas para luchar y salir adelante”, expresó. “Si Dios está por nosotros ¿quién contra nosotros? (Romanos 8:31).
Mario Carabez Jr., casado por la Iglesia con Liza Sáenz tiene cinco hijos: 3 de ella y dos de el: Sofía, Andrew Ramírez y Kevin Sáenz, además de Mario III y Andrew Carabez, manifestó que en las familias es importante remover situaciones de tristeza y orgullo con perdón y paciencia. ¿Cuántos desafíos hay en la familia? … ¡Muchos!”, dijo. “Pero Jesús puede limpiar y sanar los matrimonios y toda la familia”.
Refiriéndose a la cita bíblica del ciego Bartimeo (“Llegan a Jericó. Y cuando salía de Jericó, acompañado de sus discípulos y de una gran muchedumbre, el hijo de Timeo (Bartimeo), un mendigo ciego, estaba sentado junto al camino. Al enterarse de que era Jesús de Nazaret, se puso a gritar: «¡Hijo de David, Jesús, ten compasión de mí!»”, Marcos 10:46-47).
¿Cuánto tuvo que gritar para que Jesús lo escuchara? ¿Cuántos no quisieran decirle, “Jesús, ten compasión de mí y de mi familia? El gritaba y muchos querían callarlo y le decían él no te va a oír, como cuando nosotros acudimos a otras personas que están alejadas de Dios. Sin embargo si nosotros actuamos como Bartimeo con la seguridad de que Jesús nos va a escuchar, él nos va a liberar y a dar la esperanza que nos fortalece.
En efecto, el evangelista Marcos (10:49-52) escribió: “Jesús se detuvo y dijo: «Llamadle.» Llaman al ciego, diciéndole: «¡Animo, levántate! Te llama.» Y él, arrojando su manto, dio un brinco y vino donde Jesús. Jesús, dirigiéndose a él, le dijo: «¿Qué quieres que te haga?» El ciego le dijo: «Rabbuní, ¡que vea!». Jesús le dijo: «Vete, tu fe te ha salvado.» Y al instante, recobró la vista y le seguía por el camino”.
Ese es el clamor a Dios que hacen Martín Hernández y su esposa Rocío Alatorre, feligreses de la Iglesia San Policarpo de la ciudad de Stanton.
“Aunque no tenemos hijos, mi esposa es la familia que Cristo me ha regalado para conocer su amor incondicional por mí”, dijo él. Y ella añadió: “El matrimonio debe basarse en el respeto y la comunicación, porque, a pesar de las dificultades nuestra unión bendecida por Dios es por siempre y para siempre, aun cuando surjan problemas”.
Al respecto del perdón en los matrimonios el Papa Francisco recomendó no dejar lugar “a ese rencor que se añeja en el corazón”, sino trabajar en “un perdón que se fundamenta en una actitud positiva, que intenta comprender la debilidad ajena y trata de buscarle excusas a la otra persona”.
El Papa aseguró que la comunión familiar “puede ser conservada y perfeccionada solo con un gran espíritu de sacrificio”, que exige “una pronta y generosa disponibilidad de todos y cada uno a la comprensión, a la toleran cia, al perdón, a la reconciliación”.