Los católicos comparten la creencia que los siete sacramentos son el centro de nuestra fe. La iniciación en la Iglesia sucede en el Sacramento del Bautismo durante la infancia. Entonces, cuando llegamos el pleno uso de la razón, alrededor de los 7 años, la Iglesia nos invita a recibir el Cuerpo de Cristo en el Sacramento de la Eucaristía. Al mismo tiempo, nos reconciliamos con la comunidad eclesial a través de la confesión en el Sacramento de la Reconciliación.
Los padres a menudo olvidan la gran cantidad de preguntas que tuvieron durante este período intenso —sobre los sacramentos y los preparativos necesarios, sobre lo que significa confesar nuestros pecados por primera vez, y sobre recibir la Eucaristía en la Primera Comunión.
Las escuelas parroquiales trabajan arduamente para que los padres participen en la preparación sacramental. A medida que los niños se preparan para la Confesión y la Primera Comunión, se anima a los padres a unirse a ellos en el estudio de los textos y materiales, y entablar un diálogo sobre el significado de los sacramentos.
la preparación para la confesión
Ir al confesionario es similar a pedir disculpas a mamá y papá. Para prepararse, los niños deben reflexionar sobre las maneras en que han disgustado a Dios. Suena simple, pero el proceso es difícil, especialmente para los niños. Algunas de las preguntas que podrían ayudarles en la preparación son:
1. ¿He negado mi fe?
2. ¿He usado el nombre de Dios en vano?
3. ¿He dejado de cumplir una promesa?
4. ¿He honrado todos los domingos al celebrar la misa?
5. ¿He mostrado respeto a mis padres, mis maestros y familiares?
6. ¿He sido impaciente, envidioso, orgulloso, celoso, vengativo o perezoso?
7. ¿He perdonado a otros?
8. ¿He sido casto en pensamiento y palabra?
9. ¿He hablado mal de otra persona?
10. ¿He dicho siempre la verdad?
la preparación para recibir la eucaristía
La revista “Catholic Parent” dice que los padres pueden ayudar a sus hijos a entender y prepararse para la Primera Comunión al conectar la experiencia con sus vidas.
Dado que para los niños uno de sus principales prioridades en la vida es la comida, entonces la comida puede ser un inicio natural para entablar conversaciones sobre la Eucaristía. “La Eucaristía es una comida. Sobre la mesa del altar, Jesús nos alimentar con Su Cuerpo y Sangre, bajo la apariencia de pan y vino”.
Los amigos son muy importantes para los niños. Sus amistades pueden ser una manera para hablar de la Eucaristía: “Nos gusta estar rodeados de amigos, y nuestro afecto por ellos crece. Jesús nos llamó amigos, y a través de la Eucaristía hizo posible que estuviéramos con Él”.
El concepto de regalar obsequios puede ayudar a los niños a comprender el elemento de sacrificio de la Eucaristía. “Entregamos regalos como un signo de entregar algo de nosotros a las personas que amamos”.
Celebramos aniversarios como los cumpleaños —y la Eucaristía es la celebración del evento más importante de la historia. “La Eucaristía es una celebración. Nos reunimos con amigos para recordar la muerte y la resurrección de Jesús”.