(ACI Prensa/EWTN Noticias) – Un día como hoy, hace 48 años, la Corte Suprema de Estados Unidos emitió el fallo Roe vs. Wade que abrió la puerta a la legalización del aborto en todo el país, y que desde entonces ha permitido el exterminio legal de más de 60 millones de bebés en el vientre materno.
La Corte Suprema de Estados Unidos falló el 22 de enero de 1973 a favor del aborto luego que a comienzos de 1970, Norma McCorvey (que asumió el seudónimo de Jane Roe) alegara que había sido violada por una pandilla y que producto de ello había quedado embarazada.
Las abogadas Sarah Weddington y Linda Coffee, recién graduadas de la Facultad de Leyes de la Universidad de Texas, convencieron a Norma de que debería abortar en lugar de dar a su bebé en adopción.
Mientras el caso era visto en los tribunales de justicia, la bebé nació y fue dada en adopción. Nunca fue abortada.
En 1987, McCorvey admitió que había mentido y que no había sido violada por unos pandilleros. El padre de su bebé era una persona a la que ella conocía y quería.
Hace más de veinte años, Norma se convirtió al catolicismo y dedicó su vida a promover la defensa de los no nacidos, hasta que falleció el 18 de febrero de 2017.
Todos los años la Iglesia en Estados Unidos promueve una gran iniciativa nacional en la que participan personas sin distinción de afinidad religiosa o política, con la que se busca revertir el fallo de 1973 para acabar con el drama del aborto en el país.
Para ello proponen una serie de actividades, como el rezo de una novena en sufragio de los bebés que han muerto por esta práctica y por los que están en peligro de ser asesinados en el vientre materno.
Este año la gran Marcha por la Vida se realizará de forma virtual el viernes 29 de enero desde Washington D.C., donde participará solo un número reducido de representantes. Los interesados en participar en la marcha virtualmente pueden ingresar AQUÍ.
Los organizadores tomaron la decisión de realizarla de forma remota, porque la pandemia de COVID-19 está llegando a su punto máximo en el país, y también, tras considerar los grandes esfuerzos de los agentes del orden y de otras personas para garantizar la seguridad de todos ante la posible contención de más disturbios en el Capitolio, luego de los hechos del 6 de enero.
Luego del ataque al Capitolio por parte de partidarios de Donald Trump, que fue condenado por la Iglesia Católica en Estados Unidos, y en previsión de la toma de posesión del presidente electo Joe Biden el 20 de enero, el National Mall fue cerrado hasta al menos el 24 de enero, pocos días antes de la Marcha por la Vida. Según Associated Press, cerca de 21 mil agentes de la Guardia Nacional están vigilando el área.
El año pasado el evento se realizó de forma multitudinaria en el National Mall, donde asistió por primera vez en la historia de la marcha, el entonces presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
Trump dijo que “era un honor” ser el primer gobernante en asistir a la Marcha por la Vida y dijo que el objetivo de estar todos reunidos es “para defender el derecho de cada niño, nacido y no nacido, a cumplir su potencial dado por Dios”.
“Todos los que estamos aquí hoy comprendemos una verdad eterna: Cada niño es un regalo precioso y sagrado de Dios. Juntos debemos apreciar y defender la santidad y dignidad de la vida humana”, expresó.
“Cuando vemos la imagen de un bebé en el útero, vislumbramos la majestad de la creación de Dios. Cuando sostenemos a un recién nacido en nuestros brazos, sabemos el amor infinito que cada niño trae a una familia. Cuando vemos crecer a un niño, vemos el esplendor que irradia cada alma humana”, agregó.
El mandatario también se dirigió a los jóvenes para decirles que “son el corazón de la marcha por la vida y es su generación la que está haciendo de Estados Unidos la nación profamilia, provida”. Del mismo modo, recordó la devoción y liderazgo de las mujeres, en especial de las madres, a quienes llamó “heroínas”.
Sin embargo, con la nueva administración de Joe Biden es posible que varias de las medidas a favor de la vida sean revocadas y se impulsen otras que promuevan el aborto incluso en el exterior.